La amenaza de las micotoxinas en acuicultura

Los ingredientes utilizados en el alimento para peces se componen de cereales y sus subproductos, que son un sustrato natural para el desarrollo fúngico que puede conducir a la síntesis de micotoxinas.

Según los autores, el actual nivel aceptable para las micotoxinas sugerido por la FDA, la CE, el Codex Alimentarius o la ESFA en los ingredientes, no puede asegurar un efecto no dañino de estas micotoxinas en el alimento para peces. De hecho, muestras de alimento para peces han revelado niveles significativos de micotoxinas en diversos estudios, con policontaminación frecuente. Además, se han realizado muchos estudios para determinar los síntomas de micotoxicosis en los peces bajo distintas condiciones.

A pesar de que los efectos tóxicos de las micotoxinas en los animales varían dependiendo del tipo y de la cantidad de toxina y del periodo de exposición, las micotoxinas causan crecimiento y supervivencias reducidas, inmunosupresión y cambios morfológicos en los peces. Así, las pérdidas en acuicultura causadas por las micotoxinas en el alimento pueden ser significativas, resultando en pérdidas económicas en la producción acuícola.

Adicionalmente, las micotoxinas en el alimento para peces pueden ser un riesgo para la salud humana, ya que se pueden acumular en la carne y el hígado y luego ser consumidas por los humanos. Los autores enfatizan que la presencia de residuos en tejidos de pescado o en sus órganos debería estar mejor regulada y subrayan la necesidad de establecer un nivel seguro para cada tipo de micotoxina en los diferentes tipos de tejidos para diferentes especies de peces.

Los autores también recuerdan que la reducción del riesgo de micotoxinas empieza mucho antes, con una gestión apropiada en el campo y durante el almacenaje. Además, mencionan que el uso de aditivos para alimentación animal para reducir la contaminación del alimento por micotoxinas puede traer nuevas oportunidades para gestionar los problemas de micotoxinas en acuicultura.

Referencias:

Publicación Olmix Enero 2016